Si Albert y Marta volvieran a nacer, volverían a encontrarse y a enamorarse. Eso está claro. Hay parejas cuya complicidad supera cualquier  película de amor romantico que hayamos visto al cine. Una complicidad hecha por pequeños detalles, miradas, gestos. Tener la suerte de encontrar novios como ellos nos permite trabajar con pasión y hacer lo que mejor sabemos hacer. ¡Gracias por confiar en nosotros!